Hemorragias.

La hemorragia es la fuga de sangre fuera de su camino normal dentro del sistema cardiovascular provocada por la ruptura de vasos sanguíneos como venas, arterias y capilares. Es una situación que provoca una pérdida peligrosa de sangre y puede ser interna o externa.

Las hemorragias nasales son raras durante la lactancia, sin embargo pueden ser episodios frecuentes en la infancia.

Existen diversas causas que pueden provocar que la nariz sangre, y entre ellas la más frecuente es la traumática, producida por introducir los dedos o cuerpos extraños a la nariz. La segunda causa más frecuente es por irritación de la mucosa nasal, ocasionadas por infecciones respiraciones o por climas fríos y secos.

Otra causa puede ser: golpes directos sobre la nariz, fractura nasal, rinitis alérgica, pólipos o sinusitis, entre otras.

En general la hemorragia nasal es un trastorno que no presenta ninguna gravedad, ni amerita tratamiento médico específico.

La mayoría de las hemorragias nasales se detienen espontáneamente en pocos minutos. De no ser así, siente al niño cómodamente, incline su cabeza hacia adelante y comprima usted la nariz entre sus dedos índice y pulgar para cerrar los orificios nasales durante 15 minutos. Si aún así no logra controlar la hemorragia, consulte a su médico.

En todo momento mantenga hacia adelante la cabeza del niño. No la haga hacia atrás. Aunque esto es una práctica común, no es lo adecuado, pues aunque aparentemente la hemorragia se detiene, lo único que sucede con la sangre, es que en vez de salir por los orificios nasales, es deglutida.

NOTA: en niños menores de 6 meses de edad, no debe comprimirle la nariz, pues son respiraciones nasales (es decir, respiran principalmente por la nariz).

Otra cosa que puede ayudar, en especial cuando la hemorragia se produce por un golpe, es aplicar hielo, pues además de ayudar a disminuir la posible inflamación, produce Hemorragias

La hemorragia es la fuga de sangre fuera de su camino normal dentro del sistema cardiovascular provocada por la ruptura de vasos sanguíneos como venas, arterias y capilares. Es una situación que provoca una pérdida peligrosa de sangre y puede ser interna o externa.

Las hemorragias nasales son raras durante la lactancia, sin embargo pueden ser episodios frecuentes en la infancia. 

Existen diversas causas que pueden provocar que la nariz sangre, y entre ellas la más frecuente es la traumática, producida por introducir los dedos o cuerpos extraños a la nariz. La segunda causa más frecuente es por irritación de la mucosa nasal, ocasionadas por infecciones respiraciones o por climas fríos y secos.

Otra causa puede ser: golpes directos sobre la nariz, fractura nasal, rinitis alérgica, pólipos o sinusitis, entre otras.

En general la hemorragia nasal es un trastorno que no presenta ninguna gravedad, ni amerita tratamiento médico específico.

La mayoría de las hemorragias nasales se detienen espontáneamente en pocos minutos. De no ser así, siente al niño cómodamente, incline su cabeza hacia adelante y comprima usted la nariz entre sus dedos índice y pulgar para cerrar los orificios nasales durante 15 minutos. Si aún así no logra controlar la hemorragia, consulte a su médico.

En todo momento mantenga hacia adelante la cabeza del niño. No la haga hacia atrás. Aunque esto es una práctica común, no es lo adecuado, pues aunque aparentemente la hemorragia se detiene, lo único que sucede con la sangre, es que en vez de salir por los orificios nasales, es deglutida.

NOTA: en niños menores de 6 meses de edad, no debe comprimirle la nariz, pues son respiraciones nasales (es decir, respiran principalmente por la nariz).

Otra cosa que puede ayudar, en especial cuando la hemorragia se produce por un golpe, es aplicar hielo, pues además de ayudar a disminuir la posible inflamación, produce vaso constricción (disminución del calibre de los vasos sanguíneos), lo que ayuda a controlar el sangrado.

Si el niño sufre frecuentemente de hemorragias nasales, causados por irritación de la mucosa, puede llevar a cabo las siguientes maniobras para tratar de prevenir más episodios de sangrado:

• Aplicar un par de gotas nasales lubricantes de 10 a 15 veces al día en ambas fosas nasales. Puede utilizar también suero fisiológico o té de manzanilla.

• Poner un humidificado ambiental.

• Mantener lubricada la parte anterior de las fosas nasales con vaselina.

Los casos en que debe usted buscar ayuda médica son:

1. Cuando hay escurrimiento de sangre o líquido por la nariz después de haber recibido un golpe fuerte en la cabeza (sin evidencia de que se haya golpeado la nariz). En este caso, no trate de controlar la hemorragia y busque ayuda médica inmediatamente pues puede ser un signo de gravedad que indique que hay una lesión dentro de la cabeza.

2. Si usted no logra controlar el sangrado, después de intentarlo como se indicó.

3. En caso de sospecha de que exista una fractura nasal.

4. Cuando haya un cuerpo extraño dentro de la nariz usted no sea capaz de retirarlo.

5. En caso de que los episodios de hemorragia nasal sean muy frecuentes.

 (disminución del calibre de los vasos sanguíneos), lo que ayuda a controlar el sangrado.

Si el niño sufre frecuentemente de hemorragias nasales, causados por irritación de la mucosa, puede llevar a cabo las siguientes maniobras para tratar de prevenir más episodios de sangrado:

·       Aplicar un par de gotas nasales lubricantes de 10 a 15 veces al día en ambas fosas nasales. Puede utilizar también suero fisiológico o té de manzanilla.

·       Poner un humidificado ambiental.

·       Mantener lubricada la parte anterior de las fosas nasales con vaselina.

Los casos en que debe usted buscar ayuda médica son:

1.     Cuando hay escurrimiento de sangre o líquido por la nariz después de haber recibido un golpe fuerte en la cabeza (sin evidencia de que se haya golpeado la nariz). En este caso, no trate de controlar la hemorragia y busque ayuda médica inmediatamente pues puede ser un signo de gravedad que indique que hay una lesión dentro de la cabeza.

2.     Si usted no logra controlar el sangrado, después de intentarlo como se indicó.

3.     En caso de sospecha de que exista una fractura nasal.

4.     Cuando haya un cuerpo extraño dentro de la nariz usted no sea capaz de retirarlo.

5.     En caso de que los episodios de hemorragia nasal sean muy frecuentes.

¿ Qué son las hemorragias nasales?

• Es la salida de sangre por la nariz.
• El sangrado ocurre con más frecuencia en una fosa nasal únicamente.
•  Son muy frecuentes y la mayoría no son molestas, pero sí aparatosas y desagradables.
• Existen dos tipos de epistaxis:
•  Hemorragia nasal anterior: la sangre fluye por una de las fosas nasales. En principio se controlan sin ninguna dificultad.
• Hemorragia nasal posterior: se dan en la parte alta del tabique o dentro de la nariz y la sangre cae hacia la boca y garganta. Estas pueden ser más difíciles a la hora de controlarlas.
  
  

¿ Por que sangra la nariz?

• Mantener los dedos en la nariz
•  Sonarse mucho la nariz.
• Estornudar
• Infecciones, resfriados.
• Golpes, un cuerpo extraño en la nariz

¿Por qué ocurren las hemorragias?

·        La nariz contiene una gran cantidad de vasos sanguíneos diminutos que sangran fácilmente.

·        El movimiento de aire a través de la nariz puede secar e irritar las membranas que recubren el interior de ésta.

·        Así pueden formarse costras que sangran cuando se irritan al sobar, hurgar o sonarse la nariz.

·        Son más frecuentes durante el invierno, cuando los virus son comunes y el aire caliente de las áreas internas con calefacción reseca las fosas nasales.

·        Un tabique desviado, un objeto extraño en la nariz u otra obstrucción en esta parte también puede causar una hemorragia nasal.

·        La mayoría de estas hemorragias ocurren en la punta del tabique nasal, el tejido que separa los dos lados de la nariz.

·        Este tabique contiene muchos vasos sanguíneos frágiles que se pueden lesionar fácilmente.

·        Las hemorragias nasales se pueden presentar con menos frecuencia en la parte alta del tabique o más profundamente dentro de la nariz y pueden ser más difíciles de controlar.

Qué debemos hacer ante una hemorragia por la nariz

·        La persona debe sentarse y apretar suavemente la porción blanda de la nariz entre los dedos pulgar e índice, de tal manera que las fosas nasales estén cerradas.

·        Debemos mantenernos así durante unos 5 a 10 minutos.

·        Se recomienda inclinarse hacia adelante para evitar tragar sangre.

·        Respirar a través de la boca.

·        Esperar al menos 5 minutos antes de comprobar si ha parado el sangrado.

·        Casi todas las hemorragias nasales pueden controlarse de esta manera si se da suficiente tiempo para que el sangrado se detenga.

·        La aplicación de compresas frías o de hielo sobre el puente nasal puede ayudar.

·        En ningún caso se debe taponar la nariz con gasas.

·        No se recomienda acostarse.

·        Se debe evitar aspirar o soplar por la nariz durante varias horas después la hemorragia.

Cuando buscar asistencia médica

• La hemorragia no se detiene después de 20 minutos.
• La hemorragia nasal se presenta después de un traumatismo craneal, lo cual puede indicar fractura del cráneo.
• Cuando la nariz puede estar rota (si está deformada después de un golpe o una lesión).
• Si la persona padece alguna enfermedad que puede provocar un sangrado.

Lo que si puede hacer:

Lo que no se debe de hacer: